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El existencialismo es consecuencia del derrumbe del idealismo alemán que sigue a la muerte de Hegel, proporcionando desconfianza hacia la validez de conceptos universales y abstractos. Esta ideología, propia de una época pesimista y desengañada, identificó a gran parte del pensamiento europeo a finales del siglo XIX y hasta poco después de la Segunda Guerra Mundial, aunque fue más que una corriente filosófica, significó una actitud integral ante el mundo y la vida. Mounier, ideólogo del movimiento personalista –que busca rescatar el existencialismo cristiano, ahogado por el existencialismo ateo–, considera que no hay filosofía que no sea existencialista, llamando así a la corriente del pensamiento moderno que surge como una reacción de la filosofía del hombre contra el exceso de la filosofía de las ideas y de las cosas. Al existencialismo lo respalda una serie de antepasados, la historia del pensamiento está jalonada por reacciones existencialistas: con Pascal se entra al existencialismo moderno, él traza los caminos y toca casi todos los temas, a Kierkegaard se le conoce la paternidad de esta escuela, pues será él quien se levante contra el sistema de Hegel y tendrá sus mejores frutos en la escuela fenomenológica alemana: Scheler, Jaspers, beber y Nietzsche, el gran solitario que estalla como un trueno en un cielo en calma. Gabriel Marcel destaca como representante del existencialismo francés, pero será Sartre el primero que use masivamente ese término para identificar su propia filosofía –atea y pesimista de forma explícita. Aquí, el autor hace una exposición de los existencialismos y de la pluralidad de filosofías que se adscriben a esta corriente, analiza los aspectos fundamentales donde coinciden las filosofías existencialistas. Pero, en el fondo, esta obra es una interesante polémica con Sartre en la que Mounier pretende defender su filosofía personalista haciendo recaer el verdadero peso de la discusión en la negación existencialista de la precedencia de la esencia sobre la existencia. Existencialismo y personalismo tiene lazos de unión, pero sus conclusiones son muy diferentes.
